Project Description
La picada es toda una institución de las costumbres porteñas. Más allá de la buena selección de fiambres, quesos, encurtidos y un buen vermouth para acompañar, la picada es un momento del día. Ese en el que en alguna época fue la bisagra entre la salida del trabajo y el regreso a casa. Los tiempos modernos hoy suprimen ese instante mágico de la semana y, en el mejor los casos, lo reemplazan por un happy hour en un irish pub. Pero el que quiere comer una picada como Dios manda, antes de que caiga el sol, tiene alternativas con productos de primera calidad en algunos de los almacenes y bodegones de la ciudad.
¿Dónde comer las mejores picadas?
“El Japonés”.
Apodado así, como su dueño, este almacén de barrio es un festín al paladar, con exquisita calidad de mercadería y una sorprendente combinación de espumosos importados (hasta de añadas especiales). Angulas españolas, lomo de Praga, Krug francés…todo muy preciado por su clientela habitual.
Cochabamba 1701. Constitución.
Tel. 011 4304-4841.
Bar de Cao.
Integrante del puñado de bares notables que tiene la ciudad, esta esquina de 1930 fue fundada por los hermanos Cao y, además de la sidra tirada, es famoso por la abundancia y los ingredientes de sus picadas.
Av. Independencia 2400. San Cristobal.
Tel. 011 4943-3694.
El Preferido de Palermo.
Una esquina clásica para el aperitivo que reabrió sus puertas, restaurada, en el 2019, combina el encanto de un bar notable con la calidad de sus quesos y embutidos.
Jorge Luis Borges 2108. Palermo.
Tel. 011 4774-6585